La organización fascista UCD, controlada por el Opus-Dei y los magnates de Honduras y con la que los golpistas reemplazan al pueblo hondureño propone la eliminación del "salvoconducto" para el presidente Zelaya y pone el obstáculo de tiempo hasta después de meses o años de las deliberaciones de la Comisión de Verdad.
A consecuencia se prepara la orden del Fiscal para que la Fuerza Pública arreste al presidente Zelaya a su salida de la embajada del Brasil, con probable aprobación de la Corte Suprema de Justicia.
Abajo está el acuerdo entre el Presidente electo Lobo y la República Dominicana
UCD Y LA DEFENSA CONSTITUCIONAL
La Unión Cívica Democrática (UCD), es una organización integrada por diferentes grupos de la Sociedad Civil, representativos y comprometidos con los valores democráticos, la paz, la libertad, el orden y el progreso de Honduras y, fundamentalmente unidos en torno a la defensa de la Constitución de la República, el estado de Derecho y el bienestar general del pueblo.
La UCD, consecuente con sus compromisos patrióticos, con relación al contenido del documento ‘’Acuerdo para la Reconciliación Nacional y el Fortalecimiento de la Democracia en Honduras”, también denominado ‘’Acta de Reconciliación’’ suscrito por los Sres. Leonel Fernández, Presidente de la República Dominicana, Porfirio Lobo Sosa, Presidente Electo de Honduras y, como Testigos de Honor, los Sres. Elvin Santos, César Ham, Felícito Avila, Ricardo Alvarez y Mario Canahuati, firmado en Santo Domingo, República Dominicana, a los 20 días del mes de enero del presente año, se pronuncia de la manera siguiente:
I. El documento antes mencionado no llena los requisitos necesarios para ser un Acuerdo entre Gobiernos, por no haberse seguido los procedimientos legales y formales establecidos en nuestro sistema jurídico y en el derecho internacional, lo cual se resume así:
a) El documento de referencia solamente contempla obligaciones para el Presidente Electo de Honduras y ninguna para el Presidente de la República Dominicana, quien tampoco, como se dice, firma como representante de la Comunidad Internacional;
b) El compromiso de hacer un Gobierno de Unidad y Reconciliación es una obligación constitucional como bien se manifiesta en el mismo documento y, además es una obligación contemplada en el Acuerdo Tegucigalpa- San José. Es decir, no es una opción, sino una obligación constitucional;.
c) Con relación al ’’salvo conducto’’ mencionado en dicho documento, viola nuestro derecho interno y el derecho internacional contemplado en las Convenciones sobre el Derecho de Asilo y Tratados Internacionales aplicables;
d) Además, dicho ‘’auto de salvoconducto’’ también viola las leyes porque se pretende otorgárselo en calidad de Presidente a una persona que dejó de serlo a partir del 28 de junio, tal como fuera acordado y ratificado por el Poder Legislativo, el Poder Judicial y otras instituciones oficiales del país. El Presidente Electo no tiene facultades para decidir al respecto;
e) El Presidente Electo también se compromete a respetar los Derechos Humanos, esa es una obligación contemplad a en nuestra Constitución, Tratados Internacionales y otras Leyes, obligación que contraerá al ser juramentado en su condición de Presidente de la República, en consecuencia, está demás que lo haga frente a un Presidente de otra nación.
f) Con relación a que el Sr. Zelaya, ’’familiares y círculo íntimo’’ podrán salir hacia la República Dominicana el próximo 27 de los corrientes en calidad de Huéspedes de aquel país, resulta violatorio de las leyes por cuanto el Sr. Zelaya y algunos de sus acompañantes tienen órdenes de captura, requerimientos fiscales y medidas sustitutivas por delitos comunes, así como prohibición para salir del país.
g) El Presidente Electo no tiene facultades para suspender la restricción de derechos ciudadanos a personas que tienen requerimientos fiscales pendientes, como es el caso del Sr. Zelaya y algunos de sus acompañantes y,
h) Finalmente, resulta innecesario que el Presidente Electo se comprometa con el Presidente de la República Dominicana a gestionar el reconocimiento internacional de su gobierno por cuanto es un compromiso nacional contenido en el Acuerdo Tegucigalpa-San José, firmado por los representantes acreditados por el ex-presidente Zelaya y por los representantes del Presidente Constitucional Roberto Micheletti en representación del Poder Ejecutivo.
II. En el documento que nos ocupa, se establece que su vigencia es a partir del momento de su suscripción, el 20 de los corrientes, fecha en la cual el Presidente Electo de Honduras no ha tomado posesión de su cargo, no ha prestado el Juramento Constitucional ni tiene las atribuciones ni facultades propias de un Presidente en funciones.
En consecuencia, la UCD acuerda:
1) Exigir respetuosamente al Sr. Presidente Electo el cumplimiento del Acuerdo Tegucigalpa-San José en el único punto pendiente, que es la conformación de la Comisión de la Verdad, integrada por profesionales probos, imparciales y de reconocida capacidad en sus correspondientes países de origen, de preferencia, de países europeos, excluyendo países de la ALBA y afines.
2) Apoyar todas las gestiones que haga el Presidente Electo a partir del ejercicio de su gestión presidencial para superar los problemas políticos, económicos y sociales, siempre que se enmarquen en el estado de Derecho, entendiendo que ninguna acción política debe hacerse fuera del contexto jurídico nacional, la política no justifica la violación a la ley.
3) Solicitar, respetuosa y enérgicamente al Sr. Presidente Electo no gestionar ningún tipo de Amnistía ni conceder Indulto sino hasta que se conozcan los resultados de la Comisión de la Verdad, de lo contrario, la Reconciliación del pueblo hondureño resultará imposible y a la vez fomentará la división entre la Sociedad Hondureña.
La UCD llama a todas sus organizaciones miembro a continuar firmes en la defensa de la Democracia y el estado de Derecho
Dado en Tegucigalpa, M.D.C., República de Honduras, a los 21 días del mes de enero del 2010.
Acuerdo para la Reconciliación Nacional y el Fortalecimiento de la Democracia en Honduras
20 de Enero del 2010
Quien suscribe, don Porfirio Lobo Sosa, Presidente electo de la República de Honduras, consciente de la responsabilidad que la historia ha puesto sobre mis hombros; convencido de la necesidad de devolver a mi país, Honduras, la tranquilidad nacional, interrumpida por aciagos sucesos recientes; deseoso de alcanzar la reconciliación de nuestro pueblo y la plena vigencia del Estado de Derecho, dando continuidad al Acuerdo de San José, Tegucigalpa, llevado a cabo bajo los auspicios del Presidente Oscar Arias, de Costa Rica, en diálogo franco y amigable con el Dr. Leonel Fernández, Presidente de la República Dominicana, y a través de su mediación, ante la comunidad internacional, hago el solemne y formal compromiso de:
1. SOBRE EL GOBIERNO DE UNIDAD Y RECONCILIACION NACIONAL
Para lograr la reconciliación y fortalecer la democracia, conformaremos un Gobierno de Unidad y Reconciliación Nacional, integrado por representantes de los diversos partidos políticos, reconocidos por su capacidad, honorabilidad, idoneidad y voluntad para dialogar, quienes ocuparán las distintas Secretarías y Subsecretarías de Estado, de conformidad con el artículo 246 y siguientes de la Constitución de la República de Honduras.
En armonía con lo anterior, procederé, tan pronto asuma las funciones de Presidente Constitucional de la República de Honduras, a dictar un auto de salvo conducto en favor del Presidente José Manuel Zelaya y de sus familiares, a los fines de que puedan ejercer a plenitud el derecho ciudadano que les corresponde al disfrute de la libertad de tránsito, tal como se encuentra consagrado en la Constitución de la República.
De igual manera, me comprometo a encabezar un gobierno respetuoso de los Derechos Humanos, donde habrá un pleno disfrute de las Libertades Públicas y, por consiguiente, ningún ciudadano hondureño se verá perseguido por sus convicciones políticas, creencias religiosas y de otro tipo.
Se establece el acuerdo de que el Presidente José Manuel Zelaya, sus familiares y los integrantes de su círculo íntimo podrán salir hacia la República Dominicana el próximo 27 de enero de 2010, en calidad de huéspedes de esa hermana nación.
2. SOBRE LA NORMALIZACION DE LAS RELACIONES DE LA REPUBLICA DE HONDURAS CON LA COMUNIDAD INTERNACIONAL
Al comprometernos a cumplir fielmente los compromisos asumidos en el presente Acuerdo, solicitamos respetuosamente la inmediata revocatoria de aquellas medidas o sanciones adoptadas a nivel bilateral o multilateral, que de alguna manera afectan la reinserción y participación plena de la República de Honduras en la comunidad internacional, y su acceso a todas las formas de cooperación.
Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que reactive lo antes posible los proyectos vigentes de cooperación con la República de Honduras, y continúe con la negociación de los futuros. En particular, instamos a que, a solicitud de las autoridades competentes, se haga efectiva la cooperación internacional que resulte necesaria y oportuna para que la Comisión de Verificación y la Comisión de la Verdad aseguren el fiel cumplimiento y seguimiento de los compromisos adquiridos en este Acuerdo.
3. ENTRADA EN VIGENCIA
Los compromisos asumidos en la presente Acta adquieren formal y total vigencia desde el mismo momento de su suscripción.
Por la reconciliación, unidad y la paz de Honduras nos comprometemos a ejecutar de buena fe la presente Acta de Reconciliación.
Suscrita en Santo Domingo, a los 20 días del mes de enero del año 2010.
Dr. Leonel Fernández Don Porfirio Lobo
Presidente de la República Dominicana Presidente Electo de Honduras
Como Testigo de Honor de la firma de la presente Acta de Reconciliación:
Elvin Santos César Ham
Ex candidato Partido Liberal Partido Unificación Democrática
Felicito Ávila Ricardo Álvarez
Ex candidato de Partido Alcalde de Tegucigalpa y
Demócrata Cristiano Presidente del Partido Nacional
Mario Canahuate
Ex candidato Presidencial Elecciones
Primarias Partido Nacional
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